¡Oh, diablos!

Oh Hell! es un atractivo juego de cartas que reta a los jugadores a apostar cuántas bazas creen que pueden ganar en cada ronda. La mecánica es sencilla: cada jugador hace su apuesta antes de que se jueguen las cartas, y sólo aquellos que acierten el número exacto de bazas ganan puntos. Si alguien no cumple su apuesta, se le restan los puntos, lo que hace que cada decisión sea aún más estratégica. La dinámica del juego asegura que al menos un jugador siempre se enfrentará a una sorpresa, ya que la suma de las apuestas puede no coincidir con el número total de bazas disponibles en esa mano. ¡Prepárate para un juego de habilidad, faroles y giros!

Índice
- Cómo jugar
- Consejos de juego
- Mecánica del juego
- Componentes del juego
- Información adicional

El juego se juega con una baraja estándar de 52 cartas. Antes de cada ronda, el número de cartas repartidas a cada jugador varía, comenzando con una sola carta en la primera ronda y aumentando progresivamente hasta el máximo posible, para luego volver a disminuir.

Cada jugador debe predecir cuántas bazas ganará en la ronda después de ver sus cartas. Esta predicción se hace en secreto y se revela simultáneamente.

El jugador situado a la izquierda del que reparte comienza la ronda jugando una carta cualquiera. Los siguientes jugadores deben seguir el palo de la carta inicial si es posible. Si no pueden, pueden jugar cualquier otra carta.

La baza la gana el jugador que juega la carta más alta dentro del palo iniciado. Si alguien no puede seguir el palo pero juega un triunfo, la baza más alta gana la ronda.

Después de cada ronda, obtienes puntos en función de tus predicciones. Si aciertas exactamente el número de bazas que predijiste, obtienes puntos adicionales además del número de bazas. Si te equivocas, obtienes menos puntos.

El truco del juego consiste en equilibrar tu predicción de forma realista con las cartas que tienes y estimar correctamente las cartas que tienen los otros jugadores. La planificación estratégica y el análisis de las jugadas son esenciales para ganar.

Objetivo principal

El objetivo principal de Oh Hell! es predecir con exactitud el número de bazas que ganará un jugador en cada ronda. Los jugadores hacen sus predicciones antes de cada ronda basándose en sus manos y en la carta que ha salido como triunfo. Tras la fase de apuestas, los jugadores intentan ganar exactamente el número de bazas que apostaron. Se conceden puntos por las predicciones correctas y, al final de la partida, gana el jugador con más puntos.

Consejos para jugar ¡Oh, diablos!

Estos son algunos consejos para mejorar en el juego ¡Oh, diablos!:

• Presta atención a la distribución de las cartas para predecir cuántos espacios en blanco ganarás.
• Observa las tendencias de tus oponentes para adivinar mejor sus próximos movimientos.
• Evalúe constantemente qué cartas aún no se han jugado y ajuste su estrategia en consecuencia.
• Recuerde que ganar el número exacto de huecos que predijo es crucial; ni más, ni menos.
• Usa tus cartas altas con cuidado, preferiblemente cuando estés seguro de que vas a ganar el nulo.
• Recuerde que en rondas medias, el palo de triunfo es una poderosa herramienta para decantar la partida a su favor.
• Considere la posibilidad de "subpujar" o "sobrepujar" estratégicamente para desequilibrar a sus oponentes y maximizar su puntuación.
• Sé flexible y prepárate para ajustar tu juego en función de los movimientos y estrategias de tus oponentes.

Vídeo sobre el juego

Mecánica de ¡Oh, diablos!

• Distribución de cartas: El juego Oh Hell! se juega con una baraja estándar de 52 cartas. El número de cartas repartidas a cada jugador varía según la ronda, empezando normalmente con una carta en la primera ronda y aumentando hasta alcanzar el número total de cartas que se pueden repartir sin agotar la baraja. En las rondas finales, el número de cartas repartidas vuelve a disminuir hasta volver a una carta.
• Definición de Trump: Una vez repartidas las cartas, la siguiente carta de la parte superior del mazo se pone boca arriba y define el palo de triunfo de la ronda. Si no hay suficientes cartas para dar la vuelta, la última mano no tendrá triunfo y se jugará sin palo predominante.
• Predicciones con truco: Empezando por el jugador situado a la izquierda del que reparte, cada jugador hace una predicción del número de bazas que cree que ganará esa ronda. Estas predicciones se anotan y se utilizan para calcular la puntuación después de cada ronda. El objetivo es conseguir exactamente el número de bazas previsto.
• Juego de cartas: Siempre que sea posible, los jugadores deben seguir el palo de la carta descubierta. Si un jugador no puede seguir el palo, puede elegir jugar una carta de cualquier otro palo, incluido el triunfo. La baza la gana la carta más alta del palo que haya salido, a menos que se haya jugado una carta del palo de triunfo, en cuyo caso gana la baza el triunfo más alto.
• Pontuação: Una vez jugadas todas las bazas de una ronda, se calcula la puntuación. Los jugadores que hayan acertado su predicción reciben una bonificación (normalmente 10 puntos) además de los puntos por cada baza ganada. Los jugadores que no hayan acertado su predicción sólo reciben puntos por las bazas ganadas, sin la bonificación adicional.
• Progresión de rondas: Cada partida de ¡Oh Hell! consta de varias rondas, en las que el número de cartas repartidas varía como se ha explicado anteriormente. La partida suele progresar desde una sola carta repartida hasta el máximo posible y luego vuelve a disminuir hasta volver a una. El ganador de la partida es el jugador con la puntuación total más alta al final de todas las rondas.

Componentes del juego ¡Oh, diablos!

Consulta todos los objetos del juego a continuación ¡Oh, diablos!:

• Baraja de cartas
• Signos de puntuación
• Tablero de juego (opcional)
• Instrucciones de juego
• Jugadores (mínimo 3)

Información adicional

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